Tipos de terrarios para reptiles

Tipos de terrarios para reptiles

Los terrarios son espacios acristalados donde recrear el hábitat de la mascota que va a vivir en él. Se pueden crear 4 tipos básicos de hábitat: el árido o desértico, el de bosque, el tropical y el acuaterrario, que dispondrá de una parte acuática.

Antes de adquirir un reptil o anfibio, es aconsejable averiguar qué tipo de hábitat precisa, pues cada uno de ellos conlleva unos cuidados distintos que habremos de valorar si estamos en disposición de proporcionarlos.

Lagarto entre las plantas

 

En los terrarios hay que controlar la humedad, la temperatura y la iluminación. Basándonos en ello habremos de instalar distintos tipos de elementos que mantengan estos valores dentro de lo que nuestro reptil necesita. También hay que tener en cuenta las plantas que necesitaremos introducir en el terrario, pues deberemos ocuparnos también de ellas.

Terrarios de hábitat desértico

Presentan una elevada diferencia de temperatura entre la diurna y la nocturna, llegando a los 40º durante el día, y poco grado de humedad. Necesitaremos instalar elementos imitando las zonas áridas y desérticas, tales como piedras, troncos secos y cuevas donde se puedan esconder si tienen demasiado calor.

El sustrato tiene que permitirles poder excavar y que no tenga elementos cortantes para evitar heridas en la piel. Las plantas naturales que podemos utilizar deberán ser muy resistentes a las altas temperaturas y que no precisen demasiado riego, como cactus, rosa de alabastro, cineria gris y centaura.

Terrarios de hábitat tipo bosque

Estos terrarios pueden adecuarse a dos climas distintos: semi-seco o semi-húmedo. Dependiendo del que queramos imitar, elegiremos más profusión de plantas o menos. Se caracteriza por ser un hábitat con mucha vegetación, ramaje y zonas húmedas. Lo mejor es incorporar algún nebulizador y una zona con una fuente o una corriente de agua.

El sustrato en las zonas de origen está compuesto de hojas, corteza y elementos vegetales donde los reptiles puedan esconderse. Colocar un tronco ramificado es fundamental, además de plantas como los potos, cintas, filodendros o el amor de hombre.

Terrarios de hábitat tropical

Es el más difícil de mantener porque precisa una temperatura constante, que no puede bajar de los 25º,  y un alto grado de humedad del 80%. La forma de mantener la humedad necesaria es a través de un sistema de lluvia. Estos sistemas son muy cómodos, pues se pueden programar según lo que necesitemos.

Un sustrato de musgo, hojas y cortezas es lo más adecuado para este tipo de hábitat tan húmedo. Las plantas deben de poder sobrevivir en ambientes con mucha agua, aunque se puede colocar algún tipo de sistema de drenaje. Además no hay que olvidarse de instalar una rejilla de ventilación para que no se recargue el ambiente.