Mientras en los países anglosajones y centroeuropeos es frecuente disfrutar de la compañía de patos como mascotas, en España es una costumbre que ha empezado a cuajar desde hace poco.
Aunque un pato no es incompatible con la ciudad, lo ideal para tener este tipo de mascotas es disponer de un jardín donde el pato pueda pasear y disfrutar del sol, de la hierba y de su buen baño.
Estas plumíferas mascotas son animales muy sociables y emocionales por lo que sería aconsejable que vivieran, al menos, junto a otro pato para que no se sientan solos. Hay que recordar que por mucho que los queramos nunca podremos suplir la compañía de otro congénere.
Mascota longevas
Los patos más comunes como mascotas provienen de los ánades europeos. Estos animales pueden vivir alrededor de 15 años, así que hay que plantearse que van a vivir mucho tiempo en nuestras vidas.
Son animales cariñosos y juguetones y muy fáciles de cuidar. Hay que tener en cuenta de que en condiciones de libertad, los patos emigrarían en invierno a zonas cálidas, por lo que es importante mantenerlos calentitos en esta estación del año.
Calentitos y a salvo
Los patos precisan disponer de un espacio para pasear libremente y una caseta para resguardarse del frío y la lluvia. En el interior podemos utilizar paja para ayudarles a mantenerse calentitos y para evitar que puedan entrar gatos u otros animales depredadores lo mejor es disponer de un espacio cubierto.
Además del alojamiento y la zona de esparcimiento, es necesario proporcionar a los patos un lugar donde hacer sus necesidades y que resulte fácil limpiar. Afortunadamente, los excrementos de los ánades no producen un fuerte olor, así que bastará con acondicionar un espacio con arena y limpiarla regularmente.
Baño, pienso y más agua
El baño es una actividad fundamental para los patos, por eso deberemos disponer de una pequeña piscina donde puedan bañarse y disfrutar del ejercicio. Cuando son muy pequeños no debemos dejarlos nadar sin vigilancia, ya que todavía no tienen plumón suficiente para mantenerse a flote y pueden ahogarse fácilmente.
Los patos mascota disponen de un pienso ajustado a sus necesidades que podemos comprarlo en establecimientos veterinarios, aunque hay que racionársela para evita que engorden. Para complementa la dieta podemos añadir verduras, maíz, zanahorias o semillas de girasol.
No podemos olvidarnos de dejarles un bebedero con agua fresca y limpia donde puedan saciar su sed, ya que los patos beben mucha agua de forma constante a lo largo del día. Tiene que ser un recipiente distinto al que utilizan para bañarse y que cambiemos a menudo.