Aunque la mayoría de las tarántulas que se comercializan como mascotas no son venenosas, sí podrían mordernos o lanzarnos pelos del abdomen como defensa ante una situación que las incomoda o en la que se sienten amenazadas.
Hay que tener en cuenta que los arácnidos no son una especie con la que se pueda formar un lazo de afecto con su cuidador, por lo que su comportamiento se basa en el instinto, de ahí que puedan reaccionar de mala manera si las tocamos demasiado.
Tampoco es un animal que pueda adiestrarse, pues esto requiere una inteligencia mayor de la que disponen. Los arácnidos solamente tienen una capacidad limitada para memorizar los hechos ocurridos, lo que les impide acumular recuerdos y relacionarlos entre sí, como hacen otros mamíferos, roedores y aves.
Un respeto a mis pelos, por favor
Como las tarántulas no formarán lazos afectivos con nosotros tampoco echarán en falta los mimos ni las caricias, más bien estarán deseando que se las deje tranquilas. Pero si deseamos tocarlas hay que hacerlo siguiendo el sentido del pelo, así evitaremos que se nos pueda clavar alguno de estos urticantes elementos.
La forma que tienen las tarántulas de lanzar el pelo como defensa es pasarse las patas delanteras por el abdomen y luego lanzar los pelos que se les han quedado adheridos. Estos pelos no son venenosos, pero sí urticantes, y si nos caen en los ojos las molestias pueden durarnos varios días. Si puede utilizar gafas durante su manipulación es una estupenda idea.
Como te pases, te muerdo
Las tarántulas son animales delicados que reaccionan por instinto a los estímulos del exterior. Una manipulación no deseada puede producir una mordedura defensiva. Como he comentado, las tarántulas que se venden en las tiendas no son venenosas, pero si nos muerden debemos lavar rápidamente la herida y desinfectarla para evitar que las bacterias se extiendan.
Si necesitamos mover a nuestra tarántula, el modo más seguro de hacerlo es pasarla a un contenedor. Se puede usar una cajita a la que le pondremos una tapa con agujeros en cuanto nuestra araña haya entrado. También se le puede tapar con una caja transparente y luego ir introduciendo despacito una lámina de cartón como base. Lo normal es que nuestra araña se suba a la lámina o a las paredes.
Mucho cuidado conmigo, nene
Si usted es de los que quieren que su tarántula camine por su mano debe tener en cuenta que debe tener mucho cuidado de que no se le caiga, ya que el abdomen es muy frágil y es muy fácil que muera de un golpe. La mejor forma de hace que se suba a la mano es colocarla delante de ella y empujarla por detrás con algún pequeño objeto como un lápiz.
Si su araña es nerviosa puede ser que se suba corriendo por el brazo y se enganche en la ropa. Tenga cuidado porque es muy difícil soltarla de ahí. Nunca deje que nadie manipule a su tarántula si no tiene experiencia, pues si se asustan y la dejan caer será la muerte de su araña.
