Hablando de peces hay una amplísima gama de especies entre la que elegir los que queremos tener en casa. En general nos permitimos el lujo de elegir a nuestras mascotas con total libertad… En el caso de los peces, el tamaño y las características de la pecera que tengamos definirán el tipo de peces que podremos permitirnos. Yo quiero un tiburón, pero como tengo una pecera de medio metro cúbico…
Por ello, los peces más habituales en nuestras peceras son los que se adhieren a ciertos criterios. Los más importantes son un tamaño adecuado y unas necesidades ambientales (temperatura, oxigenación) parejas; no podemos mezclar peces de agua caliente y fría, ni atiborrar nuestro acuario, ignorando los requerimientos de sus habitantes.
Fíjense que hemos hablado de un tamaño adecuado, no pequeño. A veces un pez pequeño puede necesitar mucho espacio o complicar la convivencia con congéneres, si son marcadamente territoriales. Asegúrense siempre de escoger especies que puedan vivir juntas sin problemas; mezclar especies incompatibles o meter demasiados ejemplares son los errores más frecuentes en nuestros acuarios.
Combinar sabiamente nuestros peces es una difícil tarea
En los acuarios de buen tamaño y en los estanques de exterior van muy bien cualquier representante de la familia de los peces gato o de las carpas, siendo la más habitual la carpa koi (Cyprinus carpio). Cuando el espacio y la profundidad son escasos, los aficionados se inclinan por peces pequeños de cardumen, teniendo en cuenta cuestiones de cría (más vale una cierta “planificación familiar”) y de rivalidad entre especies.
En las instalaciones más “profesionales” de tipo tropical son muy populares los cardúmenes formados por el neón (Paracheirodon axelrodi) y el pez hacha (Gasteropelecus sternicula). Como representantes de las especies solitarias no pueden faltar la vieja de agua (Plecostomus punctatus), el labeo bicolor (Epalzeorhynchos bicolor) o el pez payaso (Botia sidthimunki).
Pero la mayoría nos conformamos con instalaciones más sencillas, sean frías o calientes. Las peceras frías no están reñidas con los peces atractivos. Valgan como ejemplos los populares betta (Betta splendens), pez paraíso (Macropodus opercularis), la tenca (Tinca tinca) o cualquier variedad de pez rojo (Carassius auratus). En los ambientes más cálidos los imprescindibles son los Guppys, Platys, Mollys y Colas de espada.
Temperatura y espacio son los factores principales a tener en cuenta
Nos despedimos volviendo a insistir en las combinaciones arriesgadas. Infórmense bien antes de poblar su acuario. El pez paraíso, por ejemplo, no es agresivo con su especie, sino con todas las demás. Especies como algunos peces gato pueden deforestar nuestro estanque en un abrir y cerrar de ojos. No prestar atención a estos detalles puede darnos un buen disgusto.