Los loros son una de las aves exóticas más demandadas en nuestros hogares. La facilidad que supone cuidarlos, junto con su carácter divertido y vivaz le hacen especialmente atractivo como animal de compañía.
Hay que tener en cuenta que estas aves pueden vivir más de 50 años, por lo que deberemos estar dispuestos a compartir todos estos años con ellos. Además, necesitan mucha atención constante para evitar que se aburran y enfermen.
Los loros viven en comunidad, por lo que necesitará sentirse integrado en la familia. Si no tiene la compañía de otros loros, habrá que intentar que no pase mucho tiempo solo, pues eso les producirá estrés y pueden llegar a tener un comportamiento destructivo.
Tierra a la vista – Grumete al agua – Con la botella de ron…
Mucho se ha estudiado sobre la capacidad imitativa de sonidos de esta familia de aves. No se sabe si entienden o no lo que dicen, pero es cierto que pueden llegar a aprender más de 250 palabras e intercalarlas en el momento justo, tal vez por su deseo de encajar en el ambiente.
El aprendizaje de las palabras requiere mucha paciencia y un premio al acabar. Hay que empezar con una palabra fácil, que identifique con algo que le gusta, y repetírsela todos los días durante unos minutos, no alargando más de 10 minutos al principio el ejercicio.
Quiero una habitación más grande
Uno de los aspectos fundamentales para su comodidad es disponer de una jaula adecuada a su tamaño. Para elegirla debemos comprobar que nuestro loro podrá estirar sus alas abriéndolas por completo. Además, debe ser posible que la cola no toque el suelo. Es primordial que se encuentre a gusto en ella, pues deberá pasar allí mucho tiempo.
En su interior dispondremos, al menos, de dos asideros para que pueda posarse. Estos deberán de ser del grosor de su pata o más anchos, nunca de menor diámetro ni lisos, pues les pueden dañar y no les servirían como lima natural para las garras.
Juguetes, juguetes, biennnnn
Los loros son animales inquietos y muy espabilados que necesitan estímulos para su inteligencia. Un loro aburrido es más propenso a caer enfermo. La mejor forma de tener a nuestro loro entretenido es utilizar juguetes que estimulen su carácter curioso y juguetón.
No todos los juguetes son válidos. Algunos pueden representar un peligro para nuestro amigo ya que pueden tragarse alguna de sus partes o dañarse introduciendo una pata o la cabeza por ellas. Hay que huir de los juguetes que puedan tener alguna pieza susceptible de soltarse y que pueda atragantarse con ella o de juguetes con anillas grandes donde puedan engancharse, por ejemplo.