La dermatitis atópica no es exclusiva de los humanos. Perros y gatos pueden sufrir de este molesto problema y de sus consecuencias que, aunque generalmente no son muy graves si son realmente molestas.
Perros y gatos actúan y sufren la dermatitis atópica de modos muy diferentes. En los perros se trata de un problema relativamente común y fácil de identificar. El perro se rasca a menudo y suele mostrar un prurito que puede ser continuo o aparecer en determinadas épocas del año. Es fácil para cualquier dueño de un can ver cuando su animal sufre estos síntomas y acudir así al veterinario para tratar de encontrar las causas y buscar una solución al problema.
En el caso de los gatos la situación es algo más complicada. Estos pequeños felinos llevan muy marcado en su instinto el ocultar cualquier debilidad, incluidos estos picores. Por eso, muchos peludines se ocultan para rascarse y lamerse sin que los vean sus dueños, o lo hacen más a menudo durante la noche que es el momento en el que se sienten más activos. Muchas veces el propietario se da cuenta de que hay un problema de dermatitis atópica porque el gato comienza a vomitar muy a menudo bolas de pelo o porque aparece mucha caspa o un sarpullido fácilmente visible al cepillar o al jugar con la mascota.
Tanto en el caso de los perros como de los gatos es frecuente que aparezcan alopecias, generalmente zonas de pequeño tamaño que quedan sin pelo debido a los rascados y lamidos. También pueden hacerse heridas con las uñas o los dientes.
Tratamiento para la dermatitis atópica
El tratamiento de la dermatitis atópica no es sencillo. Para empezar hay que realizar un diagnóstico claro y para eso hay que descartar otras muchas causas que pueden producir síntomas similares. En algunos casos hay que realizar pruebas de alergia para determinar cuál es el patógeno que causa el problema.
Hay diferentes tipos de tratamientos. Los más agresivos son generalmente los que llevan corticoides, por lo que solo se deben de aplicar en el momento en que el animal esté sufriendo un brote fuerte de dermatitis atópica. Existen también vacunas y otros tratamientos más suaves, así como pautas y cuidados que el veterinario nos indicará para cuidar esa piel más sensible. En el caso de los perros , por ejemplo, hay que tener cuidado con los jabones que se utilizan para el baño y en ningún caso se deben de usar perfumes para mascotas que contengan alcohol y, preferiblemente, no se debe de usar perfume alguno.
