Cuando pensamos en irnos de vacaciones se nos plantea la disyuntiva de si llevarnos a nuestro perro o no. Dejarlo en una residencia de perros es una opción, pero si no conocemos realmente cómo los cuidan nos iremos con la duda de si estará bien o no. Además, muchos perros sufren de estrés al cambiar de su ambiente hogareño a un lugar desconocido.
La mejor alternativa puede ser la de contratar un servicio de cuidadores de perros. Este servicio consiste en que el perro se va a vivir a la casa de una persona no a un recinto. Será como unas vacaciones para él, pues descubrirá nuevos olores, amigos nuevos, estará mimado y querido y, aunque te eche de menos, no será traumático y verás cómo se convierten en inseparables.
Desde GUDOG ponen a nuestra disposición una red de cuidadores de perros experimentados para que podamos elegir el que más se adapte a las características de nuestra mascota. Este cuidador le brindará su hogar para que pase esos días sin ti en un ambiente agradable y familiar. Además, se incluye un seguro veterinario.
Conociendo al cuidador con antelación
La recomendación que se nos hace es que se contrate el servicio con el tiempo suficiente para que el cuidador y tu perro se puedan conocer unos días antes. Esto es fundamental si el cuidador tiene perro, pues habrá que presentarlos durante un paseo y coincidir varios días para que se hagan amigos.
De esta manera también podemos ver cómo es la persona que se va a hacer cargo de nuestro perro y cómo se lleva con él. Esto nos ofrecerá la tranquilidad de saberlo cuidado y en buenas manos. Además, te permitirá contar a su cuidador cómo es tu perro, si tiene algún problema con algo, cómo se comporta con otros perros en el paseo, etc.
Preparando la maleta perruna
Antes de dejarlo en casa de su cuidador debemos ponernos al día con el veterinario: vacunas, desparasitación y collar antipulgas y garrapatas es el kit básico que no hay que olvidar nunca. Además, habrá que facilitar previamente a Gudog los datos del chip y la fecha de nacimiento para el seguro veterinario.
En la maleta de nuestro perro debemos meter la cartilla del veterinario, una mantita que lleve su olor, una correa y un collar o arnés en buenas condiciones, comida para el tiempo que vaya a estar y, si no hay más perros en la casa del cuidador, podrá llevar sus juguetes favoritos. Si hay más perros no es recomendable por si se pelean por él.