El intervalo entre el nacimiento de cada gatito varía. Los primeros suelen ser menos espaciados, entre 5 y 15 minutos, pero cuando más avance, pueden demorarse media hora o más. La totalidad del parto puede durar hasta 24 horas.
Entre el parto de gatito y gatito, la gata aprovechará para limpiar a los pequeños y a sí misma y para reponer fuerzas. Algunas gatas aprovechan para beber y comer algo, por lo que es importante dejar a su lado agua y comida húmeda.
La gata ingerirá también la placenta que recubre a sus pequeños. Esto lo hace por dos motivos: el de alimentarse, ya que tiene muchos nutrientes, y el de limpiar la zona para evitar que los depredadores puedan detectar la ubicación de la camada.
Empezando a mamar
Una vez que el parto haya concluido las gatas acercarán a sus cachorros hasta sus mamas para que se alimenten. En contra de lo que algunas personas creen las 8 mamas producen leche, aunque no en la misma cantidad. Las situadas en la parte baja del abdomen producen más cantidad, así que serán de ellas de las que los pequeños gatos intentarán mamar.
La madre mantendrá a los pequeños limpios mediante sesiones de aseo de todo su cuerpo. Durante estas sesiones será cuando los pequeños hagan sus necesidades. La madre estimula la vejiga y el ano para que hagan pis y caca, pues por sí solos no tienen todavía ese instinto. Para mantener limpia la zona, las madres suelen comerse las defecaciones de los cachorros.
Y se hace la luz
A partir del décimo día de vida, los pequeños gatos empezarán a abrir los ojos. La madre se los limpiará durante las sesiones de aseo, pero es importante vigilar que no haya legañas. Si notamos que alguno tiene algún problema se los podemos limpiar con suero fisiológico y una gasa.
También veremos cómo el cordón umbilical se les va secando y lo empiezan a perder. Y poco a poco irán despegando sus pequeñas orejas del cráneo y empezarán a moverlas con la orientación de los ruidos.
Mamar y comer pienso a la vez
A partir de la tercera semana, los pequeños felinos ya tienen dientes. Será entonces cuando poco a poco la madre les irá empezando a enseñar a comer comida sólida. Con sus afilados dientecillos pronto serán capaces de ir mordisqueando el pienso.
La duración del periodo de lactancia dependerá de cada gata. Según vayan haciendose mayores los cachorros, y a ellas les vaya molestando que les sigan mamando porque les hagan daño con los dientes, la madre les irá dejando mamar cada vez menos. Normalmente mantendrán la lactancia hasta los dos meses, complementándola con la dieta normal de pienso.