El término pet friendly o pet-friendly hace referencia a aquellos hoteles amigos de las mascotas en las que se permite que los visitantes viajen acompañados de los miembros de la familia de cuatro patas.
Normalmente, estos establecimientos están pensados para perros, ya que son los animales que más frecuentemente viajan con sus dueños. Los gatos también viajan en ocasiones aunque es menos habitual que se desplacen debido a que es mucho más fácil dejarlos en casa solos y para ellos suele ser también preferible.
Conoce bien las normas
Es importante conocer bien las normas del establecimiento antes de reservar una habitación. Algunos hoteles se anuncian como que aceptan mascotas, pero realmente no permiten que estas puedan alojarse en la habitación, teniendo que quedarse en un cuarto en la zona de garajes que en ocasiones es poco más que un pequeño trastero.
Si no queremos sorpresas desagradables debemos de saber bien qué es lo que se nos va a permitir y, sobre todo, respetarlo para que el establecimiento continúe permitiendo que los animales se alojen en el mismo.
Lo habitual es que no se permita más de un animal por habitación y que estos deban de estar siempre con sus dueños, no pudiendo quedar solos. Tampoco se suele permitir que las mascotas estén en las zonas comunes del hotel, para evitar molestias a otros clientes.
Límites a las mascotas
En algunos de estos hoteles se permite el paso a todo tipo de perros, mientras que en otros solo están autorizados los de pequeño tamaño. Se considera perro de pequeño tamaño aquel que no supera los cinco kilos de peso, aproximadamente. En las normas del hotel debe de estar especificado si se aceptan todos los canes o hay limitaciones.
Mientras que todos los hoteles pet-friendly aceptan perros, aunque pueden poner límites, los gatos pueden no ser tan bien recibidos. Si no especifican que se aceptan gatos es mejor preguntar ya que podríamos encontrarnos con una desagradable sorpresa y no poder hospedarnos con nuestro minino.
El resto de las mascotas no son aceptadas en hoteles por lo general, aunque podemos consultar si algunos animales que no van a salir de la jaula podrían viajar con nosotros.
También es conveniente informarse sobre si hay algún tipo de cargo adicional por viajar con nuestras mascotas, para que al abonar la factura no nos encontremos con aumentos en el precio con los que no contábamos.