El periodo de vacaciones siempre representa un dilema para aquellos que tenemos mascotas: llevárnoslas o no llevárnoslas. Hay mascotas con las que no es posible irse de vacaciones, así que nos toca buscar a algún buen samaritano entre nuestros amigos o familiares que vaya a nuestra casa a cuidarla en nuestra ausencia.
Otras, como los gatos, aunque podemos llevárnosla, no es aconsejable sacarlo de su entorno familiar ya que suelen estresarse muy fácilmente. Pero los perros son animales que sufren menos si nos acompañan, ya que el vínculo que crean con nosotros es más dependiente. Por eso, siempre que sea posible, lo mejor es planear nuestras vacaciones incluyéndoles en ellas.
En los últimos años se pueden encontrar muchos hoteles para perros en los que alojar a nuestro animal mientras pasamos unos días fuera. En estos lugares, se les atiende, pasea y se les dan todos los cuidado precisos, pero psicológicamente no podremos evitar que nos echen de menos y que, incluso, sufran estrés por sentirse abandonados.
Buscar alojamiento con nuestro perro
Si planeamos irnos con nuestro perro en vacaciones disponemos de muchas más alternativas que hace unos años, cuando la única opción era alquilar un apartamento o ir a un camping. Poco a poco se ha ido expandiendo la oferta hotelera que admite animales con los dueños y ahora ya es posible encontrar este tipo de hospedaje en casi todas las zonas turísticas.
Aparte de consultar en los hoteles de la zona si admiten perros, una opción más rápida es consultar las webs especializadas en facilitar la movilidad con nuestros perros. En ellas, los usuarios informan de hoteles donde han podido alojarse con sus animales, lugares donde se puede entrar sin problema con ellos y dónde les han prohibido la entrada.
Informarse sobre la zona
Otra cosa que debemos tener en cuenta al planear llevar a nuestro perro en vacaciones es averiguar si en el pueblo o ciudad donde vamos hay ordenanzas más restrictivas que las que conocemos, no sea que nos encontremos con una desagradable multa. Si queremos ir a una zona costera, habrá que consultar en qué playas podemos acceder con nuestro perro.
Si no hemos localizado ninguna por internet, lo mejor es preguntar en el hotel o a los vecinos de la zona que tengan perro. Seguro que ellos conocen muy bien todas las zonas donde pueden disfrutar libremente con su perro. Ciertamente, planear las vacaciones con tu perro te llevará un poco más de esfuerzo, pero merece la pena compartirlas con ellos.