El axolote es un animal que se mantiene fácilmente en cautividad, pero que requiere unos cuidados constantes para que su alojamiento se mantenga en las mejores condiciones. Debido a su resistencia y a su capacidad de regeneración es un animal con pocos problemas de salud que puede llegar a vivir en cautividad alrededor de 25 años.
Los ambystoma son anfibios de agua fría, por lo que habrá que prestar muchísima atención a la temperatura del agua, siendo esta la causa de la mayoría de problemas de salud que sufren estos magníficos animales. No debemos dejar que el agua alcance una temperatura superior a 20º, si esto sucede, el axolote tendrá problemas de respiración y podría ahogarse.
Lo ideal será mantener el agua del acuario entre 16 y 18 grados celsius y bajarlo a 10º durante la época de hibernación, que durará entre 3 o 4 semanas máximo. Sin embargo, los huevos resultantes de la puesta deben mantenerse a 20º, por lo que se recomienda cambiar a los ejemplares adultos de acuario para poder mantenerlos a menor temperatura.
Extremar la limpieza del agua
Otro de los cuidados que no debemos dejar de lado es la limpieza del acuario. Aunque el axolote es un animal muy resistente, las bacterias procedentes de la falta de higiene les pueden producir hongos en la piel. Por eso se debe eliminar los restos de comida que sobren y cambiar el agua y aspirar el sustrato al día siguiente de haberles alimentado, así también se elimina las deposiciones.
El agua no debe cambiarse en su totalidad, para evitar que haya un cambio brusco en las condiciones del acuario, pero nunca debe ser inferior al 20% del total de litros que habitualmente ocupan el acuario. También es importante que el pH se sitúe entre el 7’5 y el 8. Esto se consigue añadiendo anticloro al agua, siempre con cuidado de seguir las indicaciones del fabricante, pues el axolote es muy sensible a los productos químicos.
Cuidado con el tipo de piedras y plantas del acuario
Estos anfibios tienen una piel muy fina que fácilmente se puede arañar y sufrir una herida, por eso no se deben añadir piedras con bordes afilados o puntiagudos al sustrato del fondo. También hay que tener cuidado con que el alimento que les demos flote, así evitaremos que succione las piedras del fondo al tragar el alimento.
Si colocamos plantas hay que situarlas en el centro, pues al axolote le gusta desplazarse por los bordes del acuario y puede sentirse amenazado por los movimientos de las plantas. Si esto ocurre, nuestro anfibio responderá comiendo la planta. Esto nos indicará que debemos eliminar ese tipo de planta del acuario para no estresarlo.